Esta situación no se corresponde con el grado de desarrollo de la red en España, por lo que los expertos consideran que el número de proveedores debe reducirse para ganar en eficacia y rentabilidad.

El mercado ha sufrido una convulsión con las ofertas de acceso gratuito a la red lanzadas por las grandes operadoras telefónicas. Los proveedores pequeños tienen dos salidas: la primera, la agrpación en una "cadena" que les puede dar acceso a la cuota de interconexión.

La segunda opción es optar por la calidad, dando un servicio especializado para usuarios empresariales, profesionales o particulares con un nivel de exigencia mayor que la media.

El coste de un proveedor oscila en España entre las 46.771 pesetas al año que cobra Logic Control hasta las 4.990 pesetas de Okay.Net. El servicio Teleline, de Telefónica, tiene una tarifa de 19.372 pesetas anuales.