No obstante, los impuestos ambientales bajaron su peso en los tributos de la economía española en 2021, al representar un 7,2% del total, cuatro décimas menos que en 2020 y la menor cifra desde 2008. Estos datos fueron dados a conocer este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Según la clasificación del sistema de cuentas nacionales, los impuestos sobre los productos, excluidos el IVA y los impuestos sobre las importaciones totalizaron 16.390 millones de euros, un 6,3% más que en 2020. Por su parte, los otros impuestos sobre la producción alcanzaron los 3.092 millones (un 19,2% más) y los otros impuestos corrientes ambientales se situaron en 1.783 millones (un 2,5% más).

Los impuestos de naturaleza ambiental representaron un 40,6% del total de impuestos sobre los productos, excluidos el IVA y los impuestos sobre las importaciones. Por su parte, los otros impuestos corrientes con finalidad ambiental supusieron un 40,0% del total y los impuestos sobre la producción ambientales, un 13,7%

DISTRIBUCIÓN

Los impuestos ambientales se agrupan en tres categorías: impuestos sobre la energía (que en 2021 representaron un 82,0% del total), impuestos sobre el transporte (13,1%) e impuestos sobre la contaminación y los recursos (4,9%).

Los de la energía se incrementaron un 8,9% respecto a 2020, los del transporte lo hicieron un 5,8%, y los de la contaminación y los recursos, un 9,9%.

Dentro de los impuestos sobre productos, los impuestos sobre la energía alcanzaron los 15.778 millones de euros, un 7,0% más que en el año anterior.

Los hogares pagaron un 44,4% del total de impuestos ambientales en 2021. Por tipo, abonaron el 76,9% de los impuestos sobre el transporte, y un 41,8% de los impuestos sobre la energía.

Por su parte, las ramas de actividad pagaron el 55,6% del total de los impuestos ambientales. Por tipo, abonaron el 97,3% de los impuestos sobre la contaminación y los recursos, y el 58,2% de los impuestos sobre la energía.

Las ramas de actividad que pagaron más impuestos ambientales el año pasado fueron transporte y almacenamiento (17,0% del total) y suministro de energía eléctrica, gas, vapor y agua, así como la industria manufacturera (10,6% en ambos casos). Por el contrario, las que menos abonaron resultaron ser industrias extractivas, con un 0,9%, y agricultura, ganadería, selvicultura y pesca, con un 1,3%.