El informe señala que el número de estos establecimientos aumentó durante el pasado año en un 6,7% pasando de un total de 344 en 1997 a los 369 de 1998. Esto hace que España ocupe el cuarto puesto a nivel comunitario en superficie ocupada por grades superficies, por detrás de Reino Unido y Francia (ambos a la cabeza con más de 13 millones de metros cuadrados) y Alemania (con 7 millones de metros cuadrados).

Las Comunidades Autónomas que concentran la mayoría de los centros comerciales españoles son Madrid (26,6%), Andalucía (14,3%) y Cataluña (12%). El informe indica que el crecimiento experimentado por el sector se ha debido principalmente a la entrada de inversores de fuera de las fronteras españolas, que encuentran cada vez menos oportuniddes en sus países de origen.

También se refleja la tendencia de estos establecimientos a ubicarse fuera de grandes ciudades como Madrid y Barcelona, donde la falta de espacio ha obligado a los inversores a construir en otras regiones.

El informe español alude, por otra parte, al cambio de estrategias empleado por estos centros a la hora de captar público, incluyendo actividades de recreo y ocio, así como restauración y tiendas especializadas.