ETA

ESPAÑA DEBE COLOCAR MÁS ESPÍAS EN EL EXTERIOR EN ZONAS DE CONTROL DEL PETRÓLEO - Para paliar una de las deficiencias que refleja un estudio sobre la Comunidad de Inteligencia en España

MADRID
SERVIMEDIA

El Servicio de Inteligencia español debe incrementar la presencia en el Exterior con nuevos miembros porque en la última década no se ha actualizado la presencia de España, según un estudio sobre la Comunidad de Inteligencia española y su presencia en el Extranjero, editado por la Fundación Alternativas.

En dicho documento, se destaca que la comunidad de inteligencia de España, que no se ciñe únicamente a los "espías" del CNI, tiene cuatro carencias importantes, que necesitan que se haga una "reflexión al máximo nivel" sobre el modelo de comunidad (inteligencia) que necesita y quiere el país.

Las cuatro grandes carencias detectadas son "la falta de modelo de comunidad de inteligencia, la falta de evolución de elementos del CNI, la falta de relación entre consumidores y productor de inteligencia y la falta de procesos de control de la calidad, la eficacia y la legalidad del trabajo del CNI".

En cuanto a la presencia en el exterior, el informe dice que "no parece haberse actualizado en la última década y no está en concordancia con los intereses de España en este momento y, sobre todo, de aquellos que tendremos en la próxima década". A su juicio, "hay ciertas zonas donde el despliegue es ínfimo, ya que son cubiertas por un solo agente, lo que imposibilita la obtención de información verdaderamente relevante.

Apuestan porque España no refuerce su presencia en los lugares geográficos por excelencia, América del Sur, Magreb, y Europa, sino que debe orientarse a una presencia según la temática, es decir, donde se "controle" la energía, el petróleo o las amenazas ambientales, entre otros.

De cada nueve agentes de inteligencia, sólo uno está fuera de España. La casi totalidad de los agentes en el exterior está en las mismas zonas estratégicas que tenía España en los años 80, por lo que apuesta el estudio por remodelar el sistema y hacer un despligue "acorde con la política que lleva Exteriores".

Como segunda carencia, resalta la "competencia" entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a la hora de presentar su inteligencia, pero que ya "hay un intento de resolver una casi secular descoordinación entre Policía y Guardia Civil".

Por ello, destaca que "el CNI debe ser el más interesado en que comience a funcionar la comunidad (inteligencia), ya que mucha de la información que necesita tiene su origen en otras partes de la Administración".

En este sentido, el informe presentado en la Fundación Alternativas dice que el Gobienro debiera dar "muestras claras e indubitadas de que concibe la comunidad de inteligencia como un instrumento esencial para la gestión política".

Como tercera conclusión reza que "el análisis de las opiniones de los consumidores sobre los informes de inteligencia muestra toda una tipología de carencias".

A este rspecto, incide en el papel del CNI porque"debería comprender que esto le ayudaría a desarollar y entregar un producto único de gran valor añadido". Por ello, el informe apuesta por la creación de un "manual para Consumidores de Inteligencia" para que el CNI se centre en "productos muy específicos que no puedan suministrar otras agencias, algo que no debe ser dificil, ya que el Centro posee exclusivos medios tecnológicos, técnicos y humanos".

Y como última conclusión, en este documento elaborado tras diversas reuniones con agentes de inteligencia del CNI, Polícia y Guardia Civil, entre otros, insiste en que "faltan mecanismos, instrumentos y voluntad política de Gobierno y resposabilidad de los partidos políticos para que el control pueda ser adecuado".

(SERVIMEDIA)
27 Mayo 2006
M