Estas condonaciones, que forman parte de las que España realiza voluntariamente en el marco de la iniciativa HIPC de alivio de la deuda de los países más pobres y endeudados, se integran en los Programas de Conversión de Deuda firmados entre España y ambos países.

Según informó el Ministerio de la Presidencia, "esta decisión es fruto del compromiso del Gobierno español con los objetivos de condonación de deuda a los países más pobres y endeudados del mundo" y va "más allá de las condonaciones obligatorias que la comunidad internacional acuerda para estos países en el marco de esta iniciativa".