En el documento se reconoce que la violencia contra las mujeres es "una manifestación de las desiguales relacioes de poder entre hombre y mujer y que los hombres han abusado de éste para violar los derechos humanos de las mujeres".

"Manifestamos", añade el documento, "que la violencia contra las mujeres constituye un atentado contra la igualdad y contra su derecho a la vida, a la seguridad, a la libertad, a la dignidad y a la integridad física y psíquica y supone, por lo tanto, un obstáculo para su pleno desarrollo como persona".

El Congreso de los Diputados insta a todos los agentes que intervienen en laatención de la víctima a utilizar todos los medios de que disponen en la defensa efectiva de las mujeres que sufren violencia; a los hombres a rechazar el abuso de la fuerza y del poder, y a toda la sociedad a prestar apoyo a las vícitmas y colaborar con las asociaciones y grupos que luchan por erradicar la violencia.

Finalmente, se comprometen a impulsar desde este Parlamento cuantas iniciativas se propongan que vayan encaminadas a prevenir y erradicar la violencia y ayudar a las víctimas de las agreiones físicas y psíquicas, con el fin de que en nuestro país se produzca un grado de tolerancia cero de la violencia contra las mujeres a nivel individual, colectivo e institucional.