Se trata de 23 figuras negras de gran volumen, de personajes amables y rechonchos, como los que pueblan la pintura que ha hecho famoso al autor, generalmente en solitario o en grupos de composición muy simple. La mayoría representan a seres humanos, pero hay también algunos animales.

Aunque por el momento se desconoce la fecha exacta del traslado de las piezas a Madrid, los portavoces de Caja de Madrid consultados por esta agencia señalaron que la instalación en s emplazamiento madrileño se efectuará con escasa antelación a la fecha de inauguración.

Paralelamente a la muestra al aire libre, la Galería Marlborough de Madrid, filial de la neoyorquina, expondrá cerca de la Plaza de Colón y del Paseo de Recoletos, una colección de grabados del propio Botero, que figura, como Antonio López, en la nómina de esta empresa.

Algunas de las piezas que estuvieron en Nueva York han viajado a Buenos Aires estos días, donde se exponen estos días, por lo que la muestra qe se verá en Madrid es algo más reducida que las que se vieron en París y Nueva York.