ESCUCHAS. ROMERO (IU) CONSIDERA "DE RISA" LA DIMISION DE MANGLANO

MADRID
SERVIMEDIA

El diputado de Izquierda Unida Antonio Romero considera "de risa" que el escándalo de las escuchas telefónicas del CESID pretenda resolverse con la dimisión del director de este organismo, el teniente general Emilio Alonso Manglano.

Romero declaró hoy a Servimedia qu la impresión que da es que el Gobierno ha decidido plantear el asunto "como un asalto desde fuera de las instituciones democráticas al Estado de derecho, cuando el asalto se producido desde dentro por quienes tenían la responsabilidad de garantizar los derechos constitucionales".

A su juicio, se han producido dos tipos de traiciones: una traición al Estado si se han difundido cintas que pueden hacer daño a los intereses nacionales, y otra traición a los ciudadanos, a la Constitución española y a las ersonas espiadas.

"La dimisión de Manglano es de risa, ya que no ha movido nunca un dedo sin consultar y sin pedir instrucciones a Narcís Serra y al presidente del Gobierno", dijo el diputado de IU, quien agregó que "hay una gestión integral que recae en la Presidencia del Gobierno; hay una decisión política del presidente y una coordinación operativa del vicepresidente".

En su opinión, no cabe duda que todo este escándalo debe derivar en la dimisión de González y Serra. "Esa idea de pedir ahora na unidad de todos los demócratas frente a los que quieren asaltar el Estado de derecho desde fuera, desde poderes económicos o desde poderes periodísticos, es una barbaridad, porque el Estado de derecho ha sido asaltado desde dentro por quienes tenían la responsabilidad de hacer cumplir la Constitución".

Respecto a la posición que están adoptando los socialistas, dijo que esta es una ocasión de oro para que desde las filas del Partido Socialista y desde su grupo parlamentario se mantenga un debate seio con el fin de salvar al partido. Romero confió en que la fuerte reacción de miembros del PSOE en los últimos días "no sea un nuevo amago de crítica, porque lo que ha pasado tiene una gravedad extraordinaria y no se puede resolver con la dimisión de Manglano y de algún conserje del CESID. Es un tema de alta envergadura, quizás lo más grave que ha pasado en España después del 23-F".

(SERVIMEDIA)
16 Jun 1995
CAA