El secretario general de la Conferencia Episcopal, José Sánchez, señaló en rueda de prensa que si bien los obispos no han pedido dimisiones, no excluyen que se deban producir para depurar responsabilidades.

Monseñor Sánchez manifestó que el sistema democrático exige unos niveles mínimos de confianza entre los gobernantes y ciudadanos, y añadió ue si se pone en duda la confianza en todos los políticos y partidos políticos se incurriría en una injusticia, ya que "son personas aisladas" las que, dijo, han cometido irregularidades en el desarrollo de la actividad política.

Asimismo, aseguró que no le consta que haya algún obispo en la lista de personas espiadas y añadió que para encontrar una solución al conflicto planteado debe primar el bien común y no los intereses de personas ni grupos.

Respecto al debate parlamentario celebrado ayer, iércoles, el secretario general de la Conferencia Episcopal indicó que Narcís Serra tuvo que afrontar "una situación muy dura".

HUELGA DE MEDICOS

Los obispos también se pronunciaron sobre la huelga de médicos, para denunciar el "grave deterioro" que sufre el servicio sanitario como consecuencia de la falta de entendimiento entre las partes implicadas.

Monseñor Sánchez no se pronunció sobre los pormenores de la huelga que secundan los facultativos, si bien matizó que "en el campo de la salud hayque tender a cumplir no los mínimos, sino los ideales".

Además, expresó su preocupación ante el aumento de la listas de espera que se está produciendo con motivo del paro, por lo que instó a las partes implicadas a recuperar cuanto antes "la paz social en este campo tan importante".

Finalmente, se refirió al distanciamiento suscitado entre Convergència i Unió (CiU) y el Gobierno como consecuencia del proyecto de ampliación de la ley del aborto, para manifestar que la Iglesia apoyará a la coalició catalana "y a cualquier partido" que establezca como objetivo detener e impedir la ampliación de la legislación.

Entre los asuntos que formaban parte del orden del día de la CLXII reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal, destaca la ponencia titulada "Jornadas Nacionales y Colectas", que aborda los problemas que suscita el creciente número de jornadas de ámbito mundial y nacional que celebra la Iglesia.

La ponencia advierte que el incremento del número de jornadas que se celbran en domingo puede afectar al normal desarrollo de las fiestas de precepto.

Además, los obispos han insistido en el debate sobre la "Jornada pro vida", que se celebrará por primera vez en España en 1996, en concreto el primer domingo de febrero. José Sánchez subrayó que durante la celebración de esta jornada estarán habitualmente presentes las referencias al aborto y a la eutanasia.