Así lo expuso Escrivá durante la rueda de prensa de presentación de la estadística experimental de afiliación a la Seguridad Social del mes de noviembre, en base a los resultados que se han registrado en la primera quincena.

El ministro insistió en que es positivo el dato de crecimiento “prácticamente cero” de los afiliados, poniendo como ejemplo que en los tres años anteriores a la pandemia de covid-19 (2017-2019) se registró una media de 38.000 ocupados menos en noviembre.

El titular de Seguridad Social valoró que “es un dato francamente muy bueno para el mes de noviembre” y señaló que “van pasando los meses” y, pese al “entorno complejo” internacional por la guerra en Ucrania, “no hay indicación de que se esté produciendo ningún enfriamiento del mercado de trabajo”.

En cuanto a la serie desestacionalizada, el ministro auguró que, a partir de los datos recogidos en la primera quincena del mes, noviembre concluirá con una ganancia de unos 80.000 afiliados, una de las cifras más elevadas de los últimos años. Además, en el conjunto del año, destacó que los ocupados crecerán en torno al 3,9%, un dato más elevado de lo habitual que por ejemplo se superó en 2006, pero con empleos en “actividades no sostenibles”.

Escrivá contrapuso esta situación con la actual, cuando remarcó que están creciendo los empleos, sobre todo, en sectores de alto valor añadido, como la I+D+i, que se encuentra más de un 17% por encima que antes de la pandemia.

También ensalzó que España está un 4% por encima del nivel prepandemia, mientras algunos países apenas han recuperado este nivel. En concreto, citó a Italia, que está alcanzando ahora los registros anteriores a la covid-19 y a Reino Unido, que aún “no ha llegado”.

En esta línea, señaló que España está en casi un 3% por encima del nivel previo a la guerra. Hasta septiembre, duplica el crecimiento de otros países europeos, que además “muestran menor dinamismo en el tercer trimestre”.

En cuanto a los tipos de contratos, el titular de la cartera de Seguridad Social hizo hincapié en los efectos de la reforma laboral que, en su opinión, ha propiciado la reducción de la temporalidad, especialmente entre los jóvenes. Al hilo, remarcó que la duración media de todos los contratos en España, en comparación con 2019, ha aumentado en 48 días, un 24%.

Además, subrayó que los fijos discontinuos representan menos del 7% sobre el total de los afiliados con contratos indefinidos, al tiempo que celebró que, en 2022, tres de cada cuatro nuevos afiliados con contrato indefinido tienen un contrato fijo.

Finalmente, afirmó que el dinamismo del empleo y el cambio en su composición hacia sectores más productivos impulsa el aumento de las cotizaciones sociales, que se acercan al 11% del Producto Interior bruto (PIB). De hecho, detalló que el crecimiento de la recaudación por cotizaciones es este año del 8,3%.

Por ello, preguntado por la contradicción que supone que el empleo crezca y no lo hagan en la misma medida las horas trabajadas, Escrivá respondió que es una encuesta de “baja calidad”. Dicho indicador lo publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) en la Encuesta de Población Activa (INE).

Escrivá recordó que se recauda por hora trabajada y que esta está creciendo. Por ello, justificó que con la pandemia hubo una “discontinuidad” en el modo de recoger la información, por lo que ahora tiene más volatilidad.