Así se expresó Escrivá en la réplica a una intervención de la diputada del PP Alicia García en el Pleno del Congreso de los Diputados, en la que denunció que la reforma del régimen de autónomos propuesta por el Gobierno “no gusta a nadie” y la equiparó con una subida de impuestos por lo que advirtió de que “el PP no va a permitir que la fiesta del señor Pedro Sánchez la paguen los autónomos a escote”.

“La realidad es justamente la contraria”, defendió el ministro, quien reprochó a la diputada que basara su intervención en “un potaje de cifras y anécdotas que no tiene ningún sentido”. “Es una falta de rigor extraordinaria”, sentenció.

A este respecto, aseguró que la reforma del régimen de autónomos es “Para tener mejores prestaciones, mejor protección y mejores pensiones” y afirmó que “no es un impuesto”.

Asimismo, tras asegurar que dos tercios de estos trabajadores verán reducidas sus prestaciones (García dio el dato contrario), defendió que los autónomos deben cotizar por rendimientos netos como hacen los asalariados.

Por otro lado, destacó que durante la crisis provocada por la pandemia en España “no hemos perdido autónomos, hemos ganado 57.000” y comparó esto con lo ocurrido en la anterior crisis, en la que se perdieron medio millón, según el ministro, por la falta de medidas de protección del Gobierno del PP.

En esta línea, explicó que en enero 108.000 autónomos seguían beneficiándose de las medidas de apoyo aplicadas durante la pandemia, aunque aclaró que, de ellos, solo 200 tienen totalmente paralizada su actividad en estos momentos.

“Estos son los hechos”, apostilló Escrivá, quien concluyó que el hecho de que el 84% de los autónomos coticen por la base mínima “es una anomalía” y “la causa principal de sus bajas prestaciones”.

Como ejemplo, apuntó que la jubilación media de los autónomos es un 40% inferior a la de los asalariados y que el 60% perciben menos de 800 euros, porcentaje que dobla al de los trabajadores por cuenta ajena.