Según Greenpeace, el objetivo del CSN era ocultar que la nube radiactiva de cesio-137, que afectó a varios países europeos, contaminó al territorio español.

Los ecologistas basan su acusación en las notas de prensa que difundió el CSN entre el pasadoviernes y el lunes, ya que aseguran que este organismo incurrió en graves contradiciones.

La organización afirma que, en una primera nota de prensa, el Consejo de Seguridad Nuclear reconoció que las estaciones de muestreo de Madrid, Almería y Tarragona habían detectado incremento de los niveles de cesio-137.

Sin embargo, Greenpeace afirma que en otra nota de prensa emitida poco después ese mismo día, y en una posterior del día 14, se suprime toda referencia a Madrid.

Para Carlos Bravo, "paree evidenciarse que el CSN, tras un previsible descontrol interno inicial, tomó la decisión de alterar sus propias notas de prensa para poder justificar su negligente actuación al no haber informado desde el primer momento a la opinión pública española e internacional de que una nube radiactiva estaba atravesando buena parte de España".