Greeenpeace denunció que en casos como éste los responsables públicos suelen ocultar las dimensiones del problema "bajo la consigna de no provocar alarma social".

"Independientemente de los gases que se hayan emitido", añadió Rodríguez, "el principal problema es que a los ciudadanos no se les informa con suficiente claridad sobre las causas del accidente,qué se ha emitido realmente y cómo les va a afectar en su salud".

Para la organización ecologista es mucho más preocupante los gases que son liberandos poco a poco, sin saberlo los ciudadanos que viven cerca de estas fábricas, que tampoco saben qué tipo de productos se manejan en ellas.

Hace unos meses se produjo un accidente similar en una fábrica de PVC de Miranda del Ebro. "De pronto", explicó, "una nube tóxica cubrió todo el área. Dijeron que no era tóxico, pero nosotros sabíamos que por su cmposición si lo era".

"Bajo la cortina de humo del alarmismo están ocultando de forma premeditada las consecuencias que sobre las personas y el medio ambiente pueden tener estas emisiones", concluyó.