Además, la demanda de CD vírgenes se ha incrementado con rapidez en España, ya que mientras en 199 se vendieron 23 millones de unidades, en 2000 fueron 105 millones y el año pasado 138 millones. Se calcula que la mitad de estos CD grabables se destinaron a copiar música.

Debido a esta escalada en las ventas de CD "piratas", artistas como Pastora Soler, David Civera y Carlos Jean, junto con representantes de la industria musical, se reunieron hoy en Madrid para expresar su preocupación por el futuro de la música española.

Hevia, ganador de un premio Platinium, declaró que "la piratería no estáafectando únicamente a los artistas internacionales, sino que también ataca seriamente a los españoles y a la cantidad de dinero disponible para reinvertir en el descubrimiento de nuevos talentos y en sus carreras".

LEGISLACION MAS DURA

Jay Berman, presidente de la IFPI, afirmó que España "es conocida por su cultura musical, rica y dinámica, pero el valor de la música se está viendo socavado por la piratería a escala masiva".

Berman calificó a los "manteros" como "piratas que no remuneran a nade el esfuerzo y tiempo que se invierte en crear, producir y promocionar música. No invierten en nuevos artistas ni asumen riesgos, simplemente sacan partido de la música de otros cuando ésta ha llegado a ser un éxito".

Paul Burger, presidente de Sony Entertainment Europe, destacó las 200 actuaciones policiales que se producen mensualmente en España contra redes de delincuencia organizada involucradas en la copia y distribución de CD falsificados.

Asimismo, exigió al Gobierno español que "continúecolaborando estrechamente con la industria", a la vez que pidió la puesta en marcha de "una legislación más eficaz y estricta que castigue y disuada a los piratas, que están perjudicando a toda la industria musical".