Según las primeras inspecciones llevadas a cabo por el ayuntamiento, aunque el vertido es escaso se trata de hidrocarburo, en concreto de una sustancia similar al aceite usado para el engrase de vehículos.

Esta agresión al Tormes es la tercera desde que el pasado20 de septiembre se vertieran unos siete mil litros de ácido sulfúrico, y, según los informes iniciales, se ha realizado directamente sobre el río.

Tras una visita de dos horas realizada por los concejales delegados de Sanidad y Medio Ambiente, Jose María Francia y Luis Calvo, respectivamente, el Ayuntamiento de Salamanca presentó un denuncia en el juzgado de guardia.

Durante el recorrido, los técnicos observaron que la sustancia tóxica se había autodisuelto aguas abajo del cauce fluvial, a su pao por la capital, y sólo en algunas zonas de ambos márgenes se detectan manchas de aceite de color oscuro.

Este atentado ecológico, que según los expertos no tiene incidencia sobre el agua potable al encontrarse la planta potabilizadora aguas arriba, se produce tres días después del último vertido de 3.500 litros de la misma sustancia, y a un día de que se cumpla el mes del vertido de 7.000 litros de ácido sulfúrico.

El producto detectado hoy podría tener su origen en alguna acción deliberada, seún los responsables municipales, a pocas horas de la convocatoria de una manifestación, fijada para las 12 de mañana, domingo, en protesta por el vertido de hace un mes.

La manifestación, que saldrá de la Plaza Mayor de Salamanca, ha sido convocada por la comisión de municipios afectados por esta agresión, que han anunciado su intención de impedir que se archiven las diligencias prácticadas por el juzgado.

La marcha estará encabezada por niños que portarán una pancarta con el lema "Que futuro nosespera" y por los alcaldes, que llevarán otra con la inscripción "Exigimos responsabilidades".