El extorsionador, que fue arrestado en Getxo (Vizcaya) exigía el pago de 3 a 25 millones de pesetas. Su detención se prodjo después de que uno de los extorsionados denunciara los hechos ante la Ertzaintza.

La Ertzaintza asegura que éste no es el primer caso de delincuente habitual que envía falsas misivas de ETA para extorsionar a empresarios. "La gama es inmesa y varía desde las casi idénticas, incluidos los sellos, hasta las imitaciones más burdas, con faltas de ortografía o palabras del argot delictivo", señala la nota de prensa.

Además, la Ertzaintza ha elaborado una serie de consejos a seguir por parte de los xtorsionados: comunicar rápidamente el hcho a la Policía Vasca; guardar discreción absoluta; no manipular ni destruir las cartas u otras pruebas, ya que son de vital importancia; no intentar jamás contactar con los extorsionadores; no pagar el dinero bajo ningún concepto; y seguir al piel de la letra las instrucciones de los expertos policiales.

"Conviene tener muy presente", concluye la Ertzaintza, "que si se paga una primera vez jamás se podrá rechazar un segundo chantaje".