En la próxima reunión de la Diputación Permanente, que se celebrará, previsiblemente, el próximo lunes, ERC defenderá las comparecencias en comisión de los ministros de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, y de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y también de la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí.

Tardá recordó unos comentarios "ácidos y muy acertados" de Pérez Rubalcaba cuando el Gobierno del PP trasladó inmigrantes irregulares desde Canarias a la península "sin orden ni control y sin avisar a las autoridades locales".

Alertó por ello del peligro de "caer en lo mismo" que entonces criticaba, y sentenció que el Gobierno empieza a dejar ver "una deriva preocupante" en algunos asuntos relacionados con la inmigración.

Criticó, por ejemplo, la presentación por parte del PSOE, junto con Izquierda Unida, de la proposición para que los inmigrantes residentes en España puedan votar en elecciones municipales.

Tardà denunció que esa propuesta no se ha debatido con las comunidades autónomas, y que el Gobierno parece no tener muy claro cómo hacer realidad la iniciativa presentada por el PSOE.

El texto fue anunciado en rueda de prensa por el portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Diego López Garrido, en lo que ERC considera un acto de "improvisación" o, cuando menos, de "desconexión" con el resto del partido, especialmente con los socialistas catalanes.

Una prueba de ello, dijo, es que López Garrido "encendió el fuego" con esa iniciativa, que después ha tenido que ser sofocado por el candidato del PSC a la Generalitat y aún ministro del Gobierno, José Montilla.

Otra posibilidad, dijo, es que López Garrido "encuentre a faltar" a Pérez Rubalcaba en la portavocía del partido y eso le lleve a cometer "jugadas tan chapuceras" como la de la presentación de ese texto.