De la Vega hizo esas manifestaciones ayer durante su intervención en la IV Conferencia de Embajadores Españoles celebrada en la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) con la asistencia del ministro de Asuntos Exteriores.

Según Cerdá, el fenómeno de la inmigración es un "problema complejo de raices profundas", en cuyo análisis "hay que evitar la demagogia que suele emplear el PP y la bravuconadas" del estilo de la de la vicepresidenta.

A su juicio, "no se puede decir alegremente que se va a cortar el flujo de inmigrantes" y si se hace así "nosotros vamos a exigir el cumplimiento de los derechos humanos" en todas las actuaciones del Ejecutivo.

Antes de adoptar medidas de fuerza en relación con la expulsión de ilegales, es necesario probar otras soluciones, entre las que Cerdá citó la necesaria creación de embajadas y oficinas de contratación en los países de origen que permitan canalizar a inmigración de manera legal.

Para ERC, la actual legislación sobre inmigración tiene un "gra boquete" en cuanto al destino de los inmigrantes que ya han pasado los 40 días de internamiento preceptivo y que no pueden ser devueltos a sus países de origen. Para esos casos, Esquerra pide una reforma de la Ley de Extranjería que abra un cauce para que esos ilegales tengan acceso a la documentación necesaria que les permita trabajar en España.