Junto al minero, que aún no ha sido identificado, podrían hallarse los otros tres que resultaron atrapados en el accidente. Los miembros dl equipo de rescate intentar llegar hasta él a través de una chimenea auxiliar desde la que ayer se pudo apreciar que el trabajador estaba aprisionado bajo una losa de pizarra de 600 toneladas de peso, lo que imposibilitó el rescate.

A mediodía de hoy, el grupo logró prolongar la chimenea hasta la séptima planta, donde se produjo el hundimiento, para perforar el costero y rescatar el cuerpo.

Esta operación permitirá mejorar las condiciones de trabajo y seguridad del grupo de rescate, para lograr na mejor ventilación y disponer de dos salidas en caso de producirse un nuevo derrumbe.

La localización del minero se produjo ayer por la noche al introducir entre la ranura que existe entre el costero y el muro del taller un alambre que chocó contra el cuerpo. El olor que desprendía fue una de las claves que guiaron a los miembros del equipo de rescate para acercarse hasta la zona.

Sin embargo, las posibilidades de llegar hasta el cadáver se ven dificultadas por la gran dureza del costero. Fuents de Hunosa no descartan tampoco que junto al trabajador localizado se puedan encontrar los otros tres que fueron atrapados en el accidente. Este rescate, según los técnicos, se está convirtiendo en uno de los más dificiles de la minería asturiana.