Lovelle indicó que "ya se sabe dónde está" y que contiene "un escándalo relacionado con altos cargos del PSOE", aunque agregó que no podía dar más datos a fin de "no estropear el tema".

El CIE, que desde que comenzó a anunciarse en la prensa en junio de este año a fin de "luchar contra la corrupció y la injusticia", ha recibido desde entonces más de un centenar de llamadas, de las que aproximadamente el 60% son realizadas por hombres, aunque, según explicó Lovelle, llama gente de todo tipo y de todas las edades.

A juicio de Carmen Lovelle, la personalidad de Ruiz-Mateos "da al pueblo una imagen de valentía y de no tener miedo a nada", lo que ayuda a los denunciantes a decidirse a realizar las denuncias, ya que saben que si no les ayuda él, "no les ayuda nadie". "Las denuncias", dijo, "transmite quizás un ambiente de desencanto general contra los partidos políticos"

La mayoría de las denuncias se refieren a la banca, la justicia y las administraciones central y autonómicas, por irregularidades en las contratas, aunque también las hay que piden ayuda sobre asuntos personales o humanos, como divorcios o errores médicos.

ROLDAN, RUBIO Y LA HIJA SECRETA DE BOYER

Entre los escándalos más importantes que los responsables del CIE aseguran haber destapado se encuentran las polémicas fotografís de Roldán, "el caso del dinero de Rubio y Boyer en Suiza" y el de la presunta hija secreta del actual marido de Isabel Preysler y ex ministro de Economía, Miguel Boyer.

Preguntado por si este último caso no forma parte de la lucha personal de Ruiz-Mateos contra Miguel Boyer, Andrés Lombardía, miembro del CIE, indicó que se trata de un caso de "carácter humano", ya que el ex ministro de Economía "no se encargó para nada" de su hija.

Carmen Lovelle manifestó que mucha gente denuncia casos y preseta pruebas, aunque bajo la condición de mantenerse bajo el anonimato, ya que tienen miedo a perder su trabajo. Otras veces los comunicantes no aportan pruebas, pero dicen dónde encontrarlas o dan "alguna pista".

Asimismo, explicó que el proceso a seguir cuando se recibe una llamada es comprobar los datos, investigar las pruebas y, si son suficientes, denunciar el caso. En este sentido, Andrés Lombardía dijo que el CIE es "un intermediario entre el denunciante y el juez".

Lombardía explicó que no e denuncian todos los casos hasta no tenerlos bien comprobados, "para no echar por tierra nuestra credibilidad". Por su parte, Lovelle señaló que las denuncias son investigadas bien por ellos mismos o bien por un detective que contratan.

Todos aquellos que conozcan algún caso de corrupción o similar pueden dirigirse al CIE, donde serán atendidos por un equipo formado por licenciados en Derecho, administrativos, un informático y una asistente social.