Según informó hoy la asociación en un comunicado, la suspensión de los vuelos por parte del Programa Mundial de Alimentos (PAM) ha dejado comunicada la zona sólo a través de peligrosas carreteras, lo que empeora la situación de una región que en los últimos días ha experimentado un incremento del conflicto entre las Fuerzas Armadas del paísla Unión Nacional para la Liberación Total de Angola (UNITA).

La guerra que sufre este país arroja unas cifras de 3,7 millones de damnificados. De ellos, casi dos millones de personas han huído de sus hogares y 90.000 han sido asesinadas o mutiladas sólo por los efectos de las minas anti-persona, que la organización cifra en 7 millones.

Debido a este conflicto, el año pasado murieron 23 personas entre oficiales de la ONU y miembros de distintas organizaciones humanitarias.

Acción contra el ambre lleva en Angola desde 1996 con programas que han beneficiado a 640.000 personas en diversas zonas. En Kuito Kuanavale, Menongue y Mavinga, los proyectos se han centrado en el suministro de agua, la construcción de un hospital y puestos de salud, así como en programas de medicina y nutrición.

Esta organización humanitaria también está presente en los distritos de Ganda, Caconda y Ombadja, en un país donde 200 personas mueren al día de hambre y el 42% de los niños menores de cinco años sufren desntrición.