ENVEJECIMIENTO. LA VIOLENCIA CONTRA LOS MAYORES ES GENERALIZADA, NO SE DENUNCIA Y TIENE COSTES ECONOMICOS Y HUMANOS ALTOS
- Según un informe que es debatido en la II Asamblea Mundial sobre el Evejecimiento
- Crear un instrumento de estudio y evaluación para los centros de asistencia primaria.
- Elaborar material didáctico sobre la violencia contra las personas mayores dirigido a los profesionales de los centros asistenciales.
- Crear y difundir un método de investigación para estudiar la violencia contra los ancianos.
- Crear un conjunto mínimo de datos sobre la violencia y las personas de edad.
- Difundir los resultados de las investigaciones en publicaciones científicas.
- Establecer un inventario mundial sobre normas de buena conducta.
- Movilizar a la sociedad civil mediante campañas de sensibilización sobre la generalización de la violencia contra los ancianos.
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La violencia que sufren las personas mayores en todo el mundo se caracteriza por ser generalizada, habitualmente no se denuncia y tiene unos costes económicos y humanos muy difíciles de sufragar por los gobiernos, según se desprende de uno de los informes que sirve como base de los debates de la II Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento.
Aunque los estudios a gran escala sobre la prevalencia de la violencia contra las personas de edad se refieren únicaente a los países desarrollados y la información es escasa, los datos disponibles demuestran que tantos los hombres como las mujeres mayores son víctimas de abusos y que éstos son generalizados tanto en los países en desarrollo como en los desarrollados.
Partiendo de la escasez de datos, tanto en España como en el resto de los países se ha constatado que el gran problema de los malos tratos a los ancianos es que no se denuncian lo suficiente, sobre todo porque en la mayoría de los casos estas situacioes se producen en el seno de la propia familia.
ESTUDIOS
La creciente evolución de los malos tratos en los ancianos se puede documentar en algunos estudios realizados, por ejemplo, en Australia, Canadá y el Reino Unido, de los que se desprende que entre el 3% y el 10% de las personas mayores han sufrido abusos o negligencias.
Por lo que respecta a los países en vías de desarrollo, donde residen la mayor parte de las personas ancianas -y que además son pobres-, todavía no se han realizado estudis sobre la violencia ni se han reunido datos estadísticos. Sin embargo, hay constancia de los hechos por las pruebas existentes de generalización de la violencia contra los ancianos en los archivos policiales, las noticias periodísticas, los archivos de los organismos de asistencia social y en algunos informes de escala menor.
En la India, en una muestra de 1.000 personas mayores se encontró que el 4% había sufrido violencia física, mientras que en Argentina el 45% de otra muestra de personas mayores e zonas urbanas dijo haber sufrido maltrato, sobre todo violencia psicológica.
COSTES DE LA VIOLENCIA
Los altos costes económicos y humanos de la violencia contra los mayores, aunque no están lo suficientemente documentados, son variados y los directos pueden estar asociados con la prevención y la intervención, como prestación de servicios, procesos penales, asistencia institucional y programas de prevención, educación e investigación.
Los costes indirectos y humanos son la menor productividad,el desmejoramiento de la calidad de vida, el dolor y el sufrimiento emocional, la pérdida de confianza y la autoestima, las discapacidades y la muerte prematura.
CONSECUENCIAS
Los problemas físicos y psicológicos que a largo plazo sufren las personas mayores provocan lesiones físicas permanentes, dependencia de medicamentos y del alcohol, disminución de la respuesta del sistema inmunitario, trastornos alimenticios crónicos y desnutrición, dejadez, depresión, temor y ansiedad crónica, tendencias suicdas y muerte.
En algunos países la conciencia sobre la violencia contra las personas de edad y las nuevas políticas sociales han contribuido a la aprobación de nuevas leyes que penalizan estos hechos y aumentan los penas para algunos tipos de delitos contras estas personas. En otros países prácticamente no hay leyes específicas para proteger a las personas mayores de actos violentos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elaborado una estrategia mundial y su primer paso ha sido realizar unestudio en ocho países: Argentina, Austria, Brasil, Canadá, India, Kenya, Líbano y Suecia. De este estudio, se desprende la importancia que tiene la atención primaria de la salud, porque es allí donde primeramente se descubre la violencia contra las personas de edad.
Los países participantes en el estudio han coincidido en que las personas de edad perciben tres grandes categorías de violencia: la negligencia (aislamiento, abandono y exclusión social), la violación de los derechos humanos, jurídicos y édicos, y la privación de opciones, decisiones, jerarquía social, recursos económicos y respeto.
Las recomendaciones prácticas de este estudio para todos los países son:
- Crear un instrumento de estudio y evaluación para los centros de asistencia primaria.
- Elaborar material didáctico sobre la violencia contra las personas mayores dirigido a los profesionales de los centros asistenciales.
- Crear y difundir un método de investigación para estudiar la violencia contra los ancianos.
- Crear un conjunto mínimo de datos sobre la violencia y las personas de edad.
- Difundir los resultados de las investigaciones en publicaciones científicas.
- Establecer un inventario mundial sobre normas de buena conducta.
- Movilizar a la sociedad civil mediante campañas de sensibilización sobre la generalización de la violencia contra los ancianos.
(SERVIMEDIA)
11 Abr 2002
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