Molas, que pidió el voto afirmativo al texto de reforma estatutaria, alabó el texto estatutario todavía en vigor, del que dijo que ha presidido el periodo más largo de prosperidad y tranquilidad en la vida catalana.

No obstante, dijo, el nuevo Estatuto es un "magnífico acuerdo para Cataluña" y también para España. "Nunca Cataluña había dispuesto de unos recursos tan importantes como los de este Estatuto, nunca de un reconocimiento tan firme de su identidad y de sus símbolos nacionales, y nunca de unos derechos y un autogobierno tan amplio y nunca se había debatido con tanto vigor y capacidad un marco de convivencia plural en el seno de la Constitución".

El portavoz de la Entesa fue rotundo al afirmar que el Estatut es "constitucional" y negó que sea una reforma encuebierta de la Carta Magna. Retó a los que no crean que es así a que lo lleven al Tribunal Constitucional para que sea el máximo órgano el que decida. "No encuentro digna la campaña de descalificaciones al por mayor que se ha llevado a cabo frente al Estatut", recalcó.

En su vehemente defensa del Estatut, Molas afirmó que "el Estatuto de Cataluña no rompe nada, los catalanes no rompemos nada. No rompemos el poder judicial, no establecemos la poligamia, ni la eutanasia, no expulsamos al Estado de Cataluña, ni ponemos al Estado en almoneda", concluyó entre los aplausos de gran parte del hemiciclo.