Gonzalo Herguedas murió como consecuencia de las múltiples heridas y contusiones causadas por el brutal choque contra las vallas metálicas que delimitan el trayecto del encierro.

Según testigos del suceso, miestras Gonzalo Herguedas intentaba reintegrar en la manaa un toro que se había escapado, un segundo astado le envistió por detrás haciéndole chocar contra las vallas.

Este accidente ha vuelto a suscitar la polémica en torno a la celebración de encierros en Castilla y León y el cumplimiento de las medidas de seguridad, competencia del Gobierno Regional.

Las Delegaciones Territoriales de la Junta de Castilla y León en cada provincia son las encargadas de establecer las medidas de seguridad, así como vigilar y controlar su cumplimiento por parte de los auntamientos de aquellas localidades que celebran encierros.

Roberto Fernández de la Reguera, delegado territorial de la Junta de Valladolid, manifestó que "las medidas de seguridad y el vallado del trayecto del encierro, son cumplidas por los ayuntamientos, pero es imposible vigilar las actuaciones de los toros y de los propios ciudadanos que corren las reses que, en mi opinión, son muchas veces los causantes de las tragedias".

Fernández de la Reguera añadió que "desde la Junta se vigila de cercael cumplimiento de estas medidas y los ayuntamientos son conscientes que carecer de ellas puede suponer que ocurra una catástrofe".