Barón participó en una de mesas redondas de la jornada parlamentaria sobre "Crisis de la Economía Global: Alternativas y Propuestas", organizada por el Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados.

En su intervención, defendió que el mercado no puede ser sólo "la ley del más fuerte", sino que debe ser un "sistema civilizado".

En este sentido, se preguntó por qué los controles veterinarios impiden vender carne con la enfermedad de las "vacas locas" pero ningún control impide "trocear hipotecas subprime, envolverlas con un lazo y venderlas como filetes de ternera de Ávila".

Con ese hilo argumental, Barón denunció que quienes han aprovechado la ausencia de controles financieros para buscar su propio enriquecimiento, han tenido para ello "menos dificultades que los bandoleros de Sierra Morena en sus tiempos".

Barón alertó de la necesidad de evitar el precedente de la crisis de 1929 y de los tres "grandes demonios" que generó: el populismo, el proteccionismo y el nacionalismo, y apostó por "terapias de choque oportunas, fuertes y precisas".

En su opinión, es crucial la defensa de la unión económica y monetaria europea, aún "en construcción", y alertó de que no habrá presidencia de un país del eurogrupo hasta la española, en 2010.

Advirtió de que ahora la Presidencia de la UE está en manos de un gobierno checo "eurofóbico", y por ello hizo hincapié en la necesidad de contribuir desde los convencidos, como España, a acometer medidas para paliar la crisis.