La chispa ha saltado con la pretensión, por parte de eurodiputados conservadores, de limitar el mandato de la nueva Comisión a tres meses, cuestión que disgustó al presidente electo, Romano Prodi, quien ha amenazado con abandonar su cargo si no obtiene un mandato de cinco años.

Enrique Barón, en calidad de líder del Partido Socialista Europeo, ha intentado aplaca los ánimos proponiendo una reestructuración del actual marco de relaciones entre Eurocámara y Ejecutivo comunitarios.

"Queremos un único voto para la investidura de la nueva Comisión Europea y poner fin a la crisis institucional que ha acosado la política europea a lo largo de todo este año", ha comentado Barón. Por otra parte, ha dejado claro que "los socialistas no pretenden que se vuelva a poner en marcha el mismo pro

De cualquier forma, el líder socialista ha recordado que el Colegio de comiarios deberá presentar, a finales de año, el programa de trabajo íntegro, y que éste deberá ser estudiado y votado por la Eurocámara. "La Comisión estará, por lo tanto, en todo momento bajo el control estrecho del Parlamento Europeo", continúa.