En declaraciones a Servimedia, Ollero dijo que la ley es de un gran alcance, llevaba en vigor de forma muy parcial e insuficiente un siglo y por un lado hace concebir muchas esperanzas, mientras que por otro genera alguna preocupación.

Tras subrayar que su entrada en vigor es "un momento histrico", indicó que "las cosas se han hecho con bastante sentido común". "Ha habido un plazo para que entre en vigor nada habitual, de un año, a través del cual ha habido oportunidad, entre otras cosas, de contemplar en los Presupuestos Generales del Estado las necesidades económicas que lleva consigo y en principio las cosas se han hecho razonablemente bien", añadió.

El portavoz de Justicia del PP considera razonable que exista cierta preocupación en la medida en que toda puesta en marcha de algo de tato alcance lleva consigo algún recelo, pero precisó que desde algún sector también es verdad que se ha puesto "el parche antes de que salga el grano".

"Son muchas las personas y las funciones que se van a ver comprometidas por esta nueva ley, que supone un desafío para todas ellas. Indudablemente, esa preocupación desborda lo que es simplemente la ley misma", señaló.

En su opinión, además, "nunca faltarán críticas que tengan un contenido de oposición política más que otra cosa, pero en todo caso s una ley que hicimos entre todos, enormemente consensuada, y no sólo tiene que colaborar la Administración Central del Estado, que lo ha hecho de una manera elocuente en los últimos años, sino también en algunos casos aquellas comunidades autónomas que tienen competencias sobre el particular".