El "Informe sobre la problemática sanitaria del SIDA", presentado hoy n rueda de prensa, abarca cuestiones como la asistencia médica, el rechazo que sufren los enfermos, medicamentos, ensayos clínicos, asistencia extrahospitalaria, situación en las cárceles, etc.

En las conclusiones del informe, el comité insiste en la necesidad de que "este problema de salud pública sea tratado desde un punto de vista exclusivamente sanitario" y "sin que se hagan valoraciones morales acerca de los comportamientos y preferencias sexuales o hábitos en relación al consumo de droga".

ras agredecer la labor desarrollada por el personal sanitario que les atiende habitualmente, los enfermos de SIDA denunciaron también, sin cuestionar globalmente al colectivo, "la respuesta corporativista por parte del personal sanitario y, muy especialmente, por parte de la clase médica".

RECHAZO Y DISCRIMINACION

Las personas afectadas por el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida consideran que cuando tienen que ser atendidas por personal sanitario distinto al habitual han de enfrentarse en mucha ocasiones "al rechazo, la discriminación y una falta de atención correcta".

Por este motivo, el Comité Ciudadano Anti-SIDA animó a que, "siempre que sea posible y por el bien de todos, se denuncien los hechos y actuaciones que puedan ir contra los derechos de los enfermos".

"Las actitudes de rechazo y la falta de asistencia debida a personas con VIH aumentan si estas personas son además adictas al consumo de drogas", asegura el informe. "Cuando un enfermo en estas circunstancias se ve obligado aingresar en un hospital, suele tratársele exclusivamente de sus problemas de salud relacionados con el SIDA".

Otra denuncia de los enfermos es la presencia habitual en la red sanitaria de "señalizaciones especiales" para identificarlos. "Esta práctica, además de ir contra el derecho a la intimidad y confidencialidad reconocido por las leyes, la consideramos discriminatoria e innecesaria", agregaron.

Además de pedir más camas, consultas y servicios, los afectados consideran "imprescindible y urgene que se lleve a cabo una planificación sanitaria adecuada en relación al SIDA".

Por lo que se refiere a la Atención Primaria, afirmaron que estos servicios les derivan automáticamente a las consultas de los hospitales, haciendo dejación de sus competencias en materia de asistencia, prevención y educación para la salud.

Según el comité, en España existen personas con SIDA que no tienen ningún tipo de cobertura sanitaria, por lo que exigen que se corrija la situación y todos puedan ser atendidos dbidamente.

"UNIDADES ESPECIALES"

"Nos manifestamos en contra de la creación de 'unidades de hospitalización especiales' para enfermos de SIDA, pues no responden ni a necesidades asistenciales concretas ni tecnológicas o clínicas, sino simple y llanamente a miedos y recelos injustificados", según los enfermos.

También piden a la Administración sanitaria que tome urgentemente medidas para solucionar los problemas de asistencia farmacéutica que tienen planteados.

En cuanto a los ensayos clínios, piden el establecimiento de protocolos y mecanismos que permitan el acceso a ellos con más rapidez y sin tantas trabas burocráticas como las que existen en la actualidad. También solicitan a los laboratorios y medios de comunicación que se abstengan de promocionar medicamentos cuya eficacia no esté confirmada.

Se refirieron también a la asistencia médica a domicilio u "hospitalización en casa", "que no debe ser nunca una excusa para la expulsión encubierta de los enfermos de los centros hospitalaros".

Respecto a la ayuda doméstica, no se explican la negativa de los distintos servicios sociales encargados de ella a atenderles. "Si nadie en el mundo se ha contagiado por convivir con un enfermo de SIDA, resulta del todo imposible que alguien se contagie por hacer una cama, limpiar un water o fregar unos cacharros de cocina", según el comité. "Acusamos a los responsables de estos servicios sociales de no actuar convenientemente y de no poner en marcha las medidas necesarias para corregir estas injsticias".

El Comité Ciudadano Anti-SIDA también reclamó hoy que la prueba de detección de anticuerpos frente al VIH sea siempre voluntaria, confidencial y anónima.

Finalmente, por lo que se refiere a los reclusos afectados por esta enfermedad, el informe propone que todos ellos, al igual que los demás presos afectados por otras dolencias, sean tratados en la red pública sanitaria y desaparezca el Sistema Sanitario Penitenciario.

También piden la modificación del artículo 60 del Reglamento Peitenciario, que regula la libertad condicional para enfermos graves, de forma que no se haga distinción entre presos preventivos y condenados, "pues ante la enfermedad y la muerte todos los reclusos con iguales".