Así se expresó Bogas en la conferencia con analistas sobre los resultados del primer trimestre, periodo en el que la eléctrica ganó 594 millones, un 75,7% más que el año anterior.

A este respecto, indicó que la compañía se siente ”muy cómoda” con los objetivos aunque espera que los resultados del resto del año no serán tan buenos como los obtenidos hasta marzo.

“Hay que ver cómo evoluciona el año y tenemos que ser cautos”, afirmó Bogas, quien reconoció que hasta marzo todo lo relativo al contexto ha sido favorable.

Para 2023, Endesa prevé que su beneficio ordinario neto (la base para el reparto del dividendo) se sitúe entre 1.400 y 1.500 millones de euros de los que el 70% se destinarán a remunerar a los accionistas.

En cuanto al resultado bruto de explotación (Ebitda) la meta para este año se sitúa entre los 4.400 y los 4.700 millones. En el primer trimestre, el Ebitda de Endesa se elevó un 60%, hasta los 1.462 millones.