La energía será vendida a la italiana Scaligera Energia y procede de las plantas que Endesa tiene instaladas en el país transalpino, donde produce actualmente 5.800 megawatios anuales y espera generar 18.000 a finales del año.

Con este contrato, Endesa eleva su cartera de clientes en Europa, con más de 500 puntos de suministro en toda Europa para grandes consumidores, principalmente empresas.