Esta iniciativa mejora la eficiencia ambiental de la planta y prolonga su vida durante otros veinticinco años, lo cual es muy relevante para satisfacer la creciente demanda eléctrica, porque se trata de la mayor central española, con 1.470 megavatios de potencia instalada.

Éste es el segundo grupo de la central que Endesa moderniza, ya que el primero, de 369 Megawatios (Mw) de potencia, fue transformado en el primer semestre de 2005 y se incorporó a la red en julio de ese año.

Esta transformación consiste en adaptar la unidad de producción térmica para que, en lugar de consumir una mezcla de lignito local con hulla subituminosa, utilice únicamente carbón importado.

En concreto, se sustituyen gran número de elementos de la caldera y de la turbina, se efectúa una modernización general de la planta.

Como resultado de todo ello se producirá una reducción sustancial en la emisión de gases a la atmósfera, ya que evitará la emisión a la atmósfera de más de un millón de toneladas anuales de CO2 y disminuirá en 1.700.000 toneladas la producción de cenizas.