El resultado de este periodo tiene en cuenta la recuperación de las cantidades aportadas para la financiación del déficit tarifario en España, estimadas en un total de 2.500 millones de euros, de los que 1.104 corresponden a Endesa.

La compañía explica que ha contabilizado este importe siguiendo el mismo criterio que las demás empresas del sector. De no haberlo incorporado, el beneficio neto total habría sido de 838 millones, un 28,5% inferior al de enero-septiembre de 2004.

El incremento del beneficio neto se ha apoyado en el fuerte crecimiento de la generación (+5,4%) y de las ventas totales de electricidad (+13,8%).

El descenso de la producción en el negocio de España y Portugal se ha debido a la indisponibilidad de algunas centrales durante el segundo y tercer trimestre del ejercicio, como consecuencia fundamentalmente de trabajos de revisión, mantenimiento o reconversión.

A su vez, el fuerte crecimiento de la producción en Europa (+43,4%) se fundamenta en el incremento en un 9,2% de la generación de Endesa Italia, lo que refleja el avanzado desarrollo de su programa de "repowering", y de la aportación de la compañía francesa Snet, que al 30 de septiembre de 2004 sólo incluía la actividad de ese mismo mes, ya que comenzó a consolidarse por integración global en los resultados en Endesa el 1 de septiembre de 2004.

Por último, el crecimiento de la generación en Latinoamérica (+5,4%) ha sido consecuencia fundamentalmente de la mayor utilización de las centrales para cubrir los incrementos de la demanda, de la aportación de la central hidroeléctrica de Ralco (Chile) y de la conversión a ciclo abierto de gas de la central de Etevensa (Perú). Estas últimas instalaciones entraron en servicio en los últimos meses del pasado año.

Endesa ha cubierto el 91% de sus ventas totales de electricidad con generación propia en los nueve primeros meses de 2005.

Las ventas totales ascendieron en los nueve primeros meses del año a 12.643 millones de euros, con un incremento del 26,8% respecto al mismo periodo de 2004. Este avance ha permitido cubrir el de los costes de los combustibles, que se incrementaron en un 29,6%.

El grueso de las ventas se concentró en España y Portugal, con una facturación de 6.175 millones de euros, para un alza del 23,6%, frente a 3.670 millones de Latinoamérica (+15,3%) y 2.798 millones del resto de Europa (+56,4%).