LAS EMPRESAS TARDAN UNA MEDIA DE 83 DIAS EN PÀGAR A SUS PROVEEDORES, SEGUN EL BANCO DE ESPAÑA

MADRID
SERVIMEDIA

Las empresas españolas están pagando a sus proveedores con un retraso medio de 83 días, lo que ha obligado a muchas de ellas a aumentar sus dotaciones para insolvencias, según un esudio realizado por el Banco de España, con datos de 1991.

El estudio pone de manifiesto el desarrollo del crédito entre las empresas al margen del sistema bancario, ya que supone un 22,5 por ciento de los pasivos financieros totales de las compañías mercantiles.

Los aplazamientos en los pagos han aumentado sensiblemente desde 1989, cuando el plazo medio de pago a los proveedores se situaba en 74 días, pero todavía son inferiores a los que regían en 1982, cuando la economía estaba en plena crisis. No obstante, el Banco de España ha expresado su preocupación ante la posibilidad de que el sistema de aplazamiento de pagos se lleve más allá de lo razonable, sobre todo porque puede crear problemas a empresas solventes.

Hay que tener en cuenta que la tardanza media en los pagos de 83 días estaría casi al límite de lo que en el sistema crediticio pasa a considerarse como préstamo moroso, lo que sucede cuando el solicitante del préstamo no ha devuelto el préstamo 90 días después de vencido.

FINACIACION INFORMAL

El informe del Banco de España pone de manifiesto que también las familias financian una parte muy importante de sus compras de artículos de consumo recurriendo a las diferentes formas de crédito que les otorgan las propias empresas.

Este mercado informal de crédito se ha desarrollado hasta el punto de que actualmente equivale al 37 por ciento de la financiación obtenida por las familias a través de los bancos, las cajas de ahorros y las cooperativas de crédito.

El problema striba, según los expertos de la autoridad monetaria, en que "el crédito directo al consumo es habitualmente una fórmula poco transparente, en la que la determinación del coste discurre por procedimientos fuera de mercado y entre agentes con difentes niveles de conocimientos técnico-financieros".

Por esa razón, "los tipos de interés, sobre los que se no dispone de información estadística, pueden ser, en algunos casos, relativamente gravosos, y se determinan según fórmulas que dan lugar a tipos efectivs, en ocasiones, comparativamente elevados".

Todo ello "supone una desventaja para el consumidor frente al crédito banciario, toda vez que éste se encuentra sometido a la normativa sobre información, transparencia y protección de la clientela del Banco de España, mientras que el allegado directamente del vendedor goza de niveles de protección sensiblemente menores".

La regulación de los préstamos y aplazamientos entre empresas no corresponde al Banco de España, ya que su Ley de Organos Rectores slo le da potestad sobre el sistema crediticio, ni tampooco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, que tiene otro ámbito de actuación.

El crédito comercial entre empresas tiene en España una importancia mayor que en la mayoría de los países desarrollados, según los datos comparativos de que dispone la entidad emisora.

En nuestro país equivale el 31,3 por cien del activo de las empresas, mientras que en el Reino Unido es el 201,; en Bélgica, un 27,8; en Portugal, un 24,6; en Holanda, un 21,; en Estados Unidos, un 17,3; y en Japón, un 28,7. Es superior a España en Francia, conun 35,2 y en Italia, con un 39,1.

(SERVIMEDIA)
23 Jul 1993
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