De ellos, 156.132 firmaron el finiquito tras negociar una indemnización con la empresa en los órganos de mediación, arbitraje y conciliación, 68.399 se vieron incluidos en expedientes de extinción de empleo y 32.863 llegaron a la última instancia, la sentencias dictadas en los Juzgados de lo Social.

Los datos del Ministerio de Trabajo muestran que los despidos aumentaron sobre todo por la ía de los expedientes de regulación de empleo que supusieron la extinción de la relación laboral, que crecieron en 37 por ciento.

También se incrementaron, un 36 por cien, los despidos ultimados a través de sentencias en las Magistraturas de Trabajo, que totalizaron 32.863 en el primer semestre del año (ya que para este apartado no se dispone de los datos de julio).

Por contra, disminuyeron un 6 por cien los despidos tramitados en los órganos de mediación y arbitraje, que son los que suelen salirmás caros a las empresas, ya que las indemnizaciones pactadas superan la media de las fijadas en los Juzgados de lo Social.

LOS SECTORES MAS AFECTADOS

Los trabajadores más afectados por despidos colectivos fueron los del sector del metal, textil, comercio al por menor, y las compañías automovilísticas y de repuestos de automoción, pese a que estas últimas han recurrido más, hasta ahora, a regulaciones menos traumáticas, basadas en la reducción de los días de trabajo.

La vía de los despidos pactdos fue más frecuente entre los empleados del comercio al por menor, la construcción, el metal, la alimentación y el textil. Las comunidades con un balance más negativo son Cataluña, Madrid y el País Vasco.

Si la evolución no se corrige en los últimos meses del año, lo que parece improbable, la cifra de despidos llegará a niveles no registrados desde 1983 y 1984, antes de la recuperación económica de la segunda mitad de los años ochenta, cuando se situaron en torno a los 425.000.

Además, las estaísticas de despidos reflejarán un crecimiento adicional cuando se contabilicen los meses de octubre y noviembre, como consecuencia de los pactados en las últimas semanas tras el anuncio del Gobierno (luego desmentido) de que haría incompatibles el seguro de paro y las indemnizaciones de despido.

El coste las indemnizaciones de despido pactadas en el primer semestre del año (último periodo para el que se dispone de información) ascendió a 176.687 millones de pesetas, unos 6.000 millones más que en el ao anterior.

A ello hay que sumar las fijadas en las sentencias de los Juzgados de lo Social, que se elevaron a 18.632 millones de pesetas, lo que representa un incremento de casi 5.000 millones respecto al 92.