Este plan de salidas incentivadas, acordado a finales de diciembre pasado con los sindicatos, prevé un máximo de 2.980 salidas de un total de 4.532 trabajadores con derecho a inscribirse por cumplir 55 años o más en 2022 y llevar al menos 15 años de antigüedad en la empresa.

Telefónica tiene previsto dar el próximo 26 de enero la cifra definitiva de salidas que se harán efectivas con fecha del 1 de febrero. Hasta la semana pasada se habían apuntado a este programa de suspensión individual de empleo unos 1.500 trabajadores y Telefónica ha calculado que el volumen de bajas se acercará a 2.700, ligeramente por encima de las 2.632 que se contabilizaron con el anterior PSI de 2019.

Telefónica ha estimado un coste de unos 1.600 millones de euros para el supuesto de que finalmente se produzcan esas 2.700 salidas. La teleco espera con estas salidas unos ahorros anuales de unos 230 millones de euros a partir de 2023.

Los trabajadores que se marchen con este PSI, percibirán el 68% del salario en el caso de los nacidos en 1967, y el 65% en el caso de los nacidos con anterioridad a 1967. La empresa asume el coste del Convenio Especial de la Seguridad Social al 100% hasta el cumplimiento de los 65 años o el alcance de la edad de jubilación ordinaria.

Además de las condiciones del nuevo PSI, dirección y sindicatos alcanzaron un acuerdo para la prórroga hasta 2023 del convenio colectivo, con una subida salarial del 1,5%, y un paquete de medidas de fomento del empleo relacionadas con la formación y la movilidad.