Prodeme dispone ya de sendas naves funcionando para cría de conejos y engorde de terneros. Los 50 internos y 5 externos que son atendidos por la asociación trabajaron personalmente, coordinaos por sus monitores, en la construcción de las 4 naves de que dispone esta granja, un ambicioso proyecto iniciado hace tres años y que está a punto de ser culminado.

Aparte de una nave en la que se crían un millar de conejos al mes y otra en la que se engordarán 500 terneros al año, Prodeme tiene instalaciones y cauces comerciales para vender, a través de Coren, 10.000 pollos cada 55 días. El problema para la puesta en marcha de estas instalaciones surgió, según Cortiñas, cuando Fenosa pidió 15 milloes de pesetas para llevar a la nave la energía eléctrica necesaria.

Las otras naves funcionan por el momento con un generador, pero la cría de pollos requiere más potencia eléctrica. Sin embargo, el gerente de Prodeme considera exageradas las pretensiones de Fenosa, dado que la potencia necesaria no es a su juicio mucho mayor que la requerida en una vivienda y la granja está a 500 metros del casco urbano.

Según Cortiñas, la empresa eléctrica afirma que para llevar la electricidad es preciso reforar todo el tramo de tendido y construir un transformador, lo que encarece la operación.

Julio Cortiñas, también presidente de la Federación de Asociaciones en Favor de los Minusválidos Psíquicos de Galicia (Fademga), considera lógico que otros vecinos a los que podría beneficiar el tendido se nieguen a realizar aportaciones millonarias y confía en alcanzar una solución negociada y a la baja con la empresa eléctrica.

La granja de Prodeme emplea a los 55 discapacitados, de edades comprendidas entrelos 16 y los 56 años, que también gestionan una pequeña fábrica de escayola y hacen pan para el autoconsumo de la residencia, después de moler el cereal (centeno o trigo) cultivado en la propia granja en un tradicional molino de agua.