El documento,al que tuvo acceso Servimedia, propone la creación de una Estructura Administrativa de "lucha contra el fascismo y defensa activa de la vida y las libertades", adscrita a la "Lehendakaritza".

Este organismo potenciaría los recursos del sector público para permitir "que se escuche socialmente la voz de quienes rechazan la exaltación de la muerte, la uniformización ideológica, la xenofobia, el etnicismo, el racismo, el rechazo al diferente y, den definitiva, todo aquello que fomenta el cáncer totalitari que roe las entrañas del país".

Además, este cauce serviría, según los socialistas, para que importentes sectores de la sociedad vasca, como los periodistas, los creadores de opinión, los empresarios y los intelectuales, colaboren más activamente en la lucha contra la violenca.

Una segunda propuesta es la creación por ley del Instituto Democrático Vasco, un órgano de reflexión permanente sobre los valores democráticos, que pueda servir de punto de encuentro entre los más cualificados exponentes el pensamiento en Euskadi.

El documento plantea también la creación de una Dirección de Derechos Humanos en el Departamento de Educación, Universidades e Investigación, para afrontar "un problema gravísimo que tiene este país: la existencia de jóvenes, adolescentes e incluso niños que consideran que es lícito matar a un semejante por no compartir una determinada ideología o creencia".

Los socialistas consideran necesario emprender medidas concretas para liderar la lucha contra ETA en el ámbito edcativo y para recuperar espacios físicos para la convivencia. En este contexto, apuntan a la firma de convenios con ayuntamientos y diputaciones para borrar todo tipo de pintadas amenazantes.

MEDIOS DE COMUNICACION

Esta ofensiva ideológica se basa también en la implicación de los medios públicos de comunicación en la "pedagogía contra el terrorismo". La beligerancia contra ETA, apuntan, debe quedar "expresamete manifestada" en el tratamiento informativo de acciones terroristas.

"Hay que acabar on el escándalo de una radio y una televisión públicas, pagadas con el dinero de todos los vascos, que prestan generosamente cámaras y micrófonos para que partidarios de ETA y organizaciones afines a la banda terrorista puedan difundir sus consignas", señalan.

El documento establece, asimismo, el compromiso del Gobierno de informar periódicamente al Parlamento vasco sobre la lucha contra ETA, de impulsar debates específicos sobre este problema, y de velar por la instauración de una reflexión ética y plítica después de los atentados en todos los centros públicos.

Estas medidas se complementan con el establecimiento de un Día por la Libertad en todo el sistema educativo, la implicación del alumnado en la toma de decisiones de los centros, y la incentivación de iniciativas con trasfondo ético, siempre con la subvención económica y el apoyo organizativo suficientes.

Además, los socialistas quieren que todos los centros escolares ratifiquen la Declaración Universal de los Derechos Humanos, con actvidades que ayuden a los alumnos a comprender su trascendencia.

El documento propone aumentar el número de tutores y el incremento de su dedicación, fomentar la cooperación de los centros escolares con las familias para atenuar la inclinación de los jóvenes hacia la violencia, y medidas concretas de ayuda a los núcleos familiares en los que se detecten ya estas actitudes.

Con estas medidas, los socialistas vascos pretenden atenuar el acercamiento de los jóvenes a los comportamientos violentos, paa evitar que ETA y sus grupos de apoyo sigan nutriéndose de adolescentes que apoyan o justifican sus acciones.