Castilleja de Guzmán, en donde hay censados 640 vecinos y a los que hay que sumar los 180 estudiantes de un colegio mayor instalado en el municipio, ha respaldado nuevamente la candidatura independiente de Escribano por mayoría absoluta: el 50,2 por ciento de los 436 votos emitidos, lo que le proporciona cuatro concejales, fente a dos del PSOE y uno del PP.

Escribano Otero, de 69 años, ha compaginado la alcaldía con su trabajo como administrativo en una empresa de transportes, en la que se jubiló en 1987. Ahora, sigue ligado a la política activa como independiente, tras rechazar la oferta del PP de encabezar su lista, alegando "un compromiso personal con mis vecinos".

Además del crecimiento inmobiliario, propiciado por la proximidad de Sevilla y la construcción de urbanizaciones de adosados, el ayuntamiento ha puest el suelo municipal a disposición del pueblo y entrega a cualquier vecino que lo solicite una parcela con todos los servicios incluidos.

Ponteareas, con 16.000 habitantes y 12.750 electores, ha eligido a Castro Alvarez, también por mayoría absoluta, consolidando la candidatura del PP con nueve concejales, frente a cuatro del Partido Socialista Gallego, tres del Bloque Nacionalista Galego y uno de Converxencia Nacionalista Galega.

José Castro (Pepe para sus vecinos) accedió a la alcaldía de Ponteaeas en 1968 gracias a su militancia dentro de Falange Española. Confiesa tener vocación de alcalde, no de político, y su actual filiación al PP responde más a su identificación con Manuel Fraga que con el partido.

Después de 28 años presidiendo la corporación municipal, Castro Alvarez ha anunciado que éstas serán sus últimas elecciones, aunque ha introducido a su hijo en su candidatura "a ver si le coge el gusto", para que todo quede en casa y pase en los próximos comicios de ser alcalde a ser padre d alcalde.

Padre de diez hijos, el principal edil de Ponteareas lamenta que su ejemplo no sea seguido por ninguno de sus vástagos, salvo éste que ha aceptado el reto para probar, a pesar de que él apuesta por la alcaldía hereditaria.