Rajoy, que con estas palabras se refería a las manifestaciones de Alfonso Guerra al poner en duda las convicciones democráticas de José María Aznar, señaló que la de los socialistas es una campaña "a la defensiva", caracterizada por el insulto.

"Es curioso", indicó, "porue el PSOE le está pidiendo el voto a los que están hartos del PSOE. Y como no pueden dar ningún argumento convincente su eje de campaña es la descalilificación de los demás. Nosotros ya hemos dicho que ante ese tipo de asuntos, pues como si lloviera. No vamos a hacerles el juego y vamos a seguir nuestra campaña moderada".

El dirigente popular insistió en que el PSOE, "consciente de su deterioro ante el conjunto de la opinión pública por su mal gobierno", ha decidido que la única forma de recuperar apyos es insultar a los demás.

Rajoy dijo que los socialistas están advirtiendo de las "grandes desgracias" que ocurrirán si gana el PP, pero subrayó que lo cierto es que los populares están gobernando en muchos ayuntamientos y comunidades, "y no ocurre ninguna de esas desgracias".