No obstante, el comité sólo fue acogido con claras muestras de apoyo por parte de los "renovadores", que han conseguido en él una representación muy superior a la que tienen en la Ejecutiva del partido, dominada por los "guerristas", al colocar a Narcis Serra, José María Maravall y Raimón Obiols.

Los "guerristas" se limitaron a asentir con más silencio que entusiasmo a un órgano en el qe, de sus ocho miembros, sólo cuentan con tres de su corriente, Alfonso Guerra, José María Benegas y Francisco Fernández Marugán.

Destacados "renovadores" como Teófilo Serrano, secretario general de la Federación Socialista Madrileña (FSM), señalaron que la composición del comité "no es cosa de pesas y medidas. La cuestión no es que haya uno más o uno menos, sino que estén representadas todas las formas de pensar del partido".

En términos parecidos se expresó Manuel Chaves, presidente de la Juntade Andalucía, para quien es un acierto de González constituir un comité "reducido y operativo, en el cual no pintabamos nada los presidentes de comunidades autónomas, que nos debemos a nuestro trabajo como presidentes".

A su juicio, la cohesión interna del partido es mayor de lo que se cree. "Hace un año nos acusaban de monolotismo y ahora de división y enfrentamiento. Ni antes era tan monolítico ni ahora está tan dividido".

Carmen García Bloise, sin adscripción definida a ninguna corriente, exprsó su confianza en que el comité acabe con la disparidad de mensajes, cerrando filas "en torno a González para hacer un seguimiento y marcar las pautas de la campaña".

Eso exige, apostilló, zanjar las descalificaciones entre socialistas. "Tenemos que dejar de mirarnos a nosotros mismos y decir a los ciudadanos, una vez llegado donde hemos llegado, cómo queremos proseguir y hacia dónde queremos ir; esto es lo más importante", recalcó.

Por su parte, Francisco Fernández Marugán, responsable de las fnanzas del PSOE y miembro del comité electoral afín al "guerrismo", anunció que el pacto sobre la ley de huelga con los sindicatos será incluido en el programa electoral.

En dicho programa, agregó, la idea fundamental será que "hay que continuar invirtiendo en este país, para que el esfuerzo que ha hecho la sociedad española a lo largo de los ochenta para modernizarse y hacerse una sociedad más cohesionada y equilibrada continúe en los noventa".

LA BATALLA DE FILESA

La polémica electoral siguiócentrada en el "caso Filesa". Con una novedad fundamental, la decisión del abogado de acusación popular Marcos García Montes, que actúa a instancias de Christian Jiménez y José María Ruiz-Mateos, de ampliar la querella a Alfonso Guerra, José María Benegas y Francisco Fernández Marugán.

La documentación remitida por García Montes a la Sala Segunda del Tribunal Supremo imputa a los tres dirigentes socialistas delitos contra la Hacienda Pública, obstrucción a la justicia, falsedad en documento y malversaión de caudales públicos en los casos de fondos procedentes de empresas públicas.

De la admisión de la querella podría depender que el caso continúe en manos del Supremo, ya que tanto Guerra como Fernández Marugán forman parte de la Diputación Permanente del Congreso y mantienen, por tanto, su condición de parlamentarios.

La decisión final se adoptará en la reunión que los 15 magistrados del Alto Tribunal mantendrán la próxima semana. Si es favorable a ceder la jurisdicción sobre el caso, ésta paaría al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

Ante esa eventualidad, su presidente, José Antonio Somalo, se mostró hoy partidario de que el "caso Filesa" continúe en el Supremo, aunque los dos acusados, Carlos Navarro y José María Sala, ya no formen parte del Parlamento nacional.

"La solución más práctica", declaró a Onda Cero, "sería que pudiera continuar en Tribunal Supremo, porque ya tiene los antecedentes, el asunto está bastante avanzado y ya lleva bastante tiempo".

LIMPIEZA DEMOCRATIA

En relación con este "affaire", la ministra portavoz del Gobierno, Rosa Conde, aprovechó la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del viernes para acusar al Partido Popular de transgedir las reglas de limpieza democrática vigentes desde la transición de la dictadura a la democracia.

Conde acusó al PP de "estar interfiriendo" en la decisión que debe tomar el Tribunal Supremo respecto a que órgano judicial es competente en el "caso Filesa", en contraste con el comportamiento del Gobieno y del PSOE, que calificó de "exquisito en esta cuestión".

En su opinión, la actitud del PP durante toda la legislatura ha perjudicado "el normal desarrollo de las instituciones" y ha generado en la sociedad española una actitud negativa hacia los responsables políticos, hacia la vida política, que es negativa para el proceso democrático español".