Sólo cuando llegó al Instituto Conde de Orgaz, donde debían votar él y su esposa, Ana Botella, el presidente del PP se percató de que había salido sin la cartera, cuando le fue requerida la presentación el Documento Nacional de Identidad (DNI).

Algo nervioso, Aznar salió del edificio, mientras su mujer permanecía en los pasillos del instituto conversando con unas señoras. Cogió el coche y se dirigió de vuelta a su domicilio para recoger el DNI.

Un cuarto de hora más tarde, a las once menos cuarto, el líder popular regresó, ya provisto de la oportuna acreditación, y pudieron votar él y Ana Botella, tras exhibir sus respectivos DNI y estrechar las manos de todos los miembros de la mesa y de buena arte de las personas que se encontraban en el recinto.

Aznar vestía de manera informal, con una cazadora y sin corbata, a diferencia del tono oficial que mostró González, que acudió a votar con traje azul y corbata, y Ana Botella lucía un traje camisero de color rojo.

Antes de despedirse, hizo un llamamiento a la responsabilidad y el compromiso de los electores después de los comicios. "Después de haber votado", declaró a la salida del colegio electoral, "espero que los españoles participen y apusten con fuerza por el futuro de la democracia y de España".

Las paredes del Instituto Conde de Orgaz habían sido pintadas esta noche con frases alusivas a las elecciones europeas, pero a la hora en que Aznar y su esposa acudieron a votar esas sentencias habían sido borradas totalmente.