Este es el caso del vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, quien ayer pronunció un mitin en la plaza de toros de Alicante, cargado de chascarrillos e irnía, en el que pidió a los asistentes que leyeran al révés el lema del PP, "soluciones", lo que provocó la hilaridad de los presentes.

Guerra, con su habitual agresividad verbal, comparó a José María Aznar con el célebre bandolero José María "El Tempranillo" y dijo que la presente campaña ha demostrado que el líder del PP no da la talla.

Las palabras del dirigente socialista tuvieron hoy cumplida réplica por parte del secretario general de los populares, Francisco Alvarez Cascos, quien aseguró enOviedo que la campaña que está llevando a cabo el PSOE, "además de ser una campaña-basura basada en insultos a los candidatos de la oposición, está científicamente estudiada para ahondar en la derrota socialista".

Alvarez Cascos acusó a Guerra de estar empeñado en que su partido pierda las elecciones y recordó que varios candidatos socialistas se han quejado de sus intervenciones en actos públicos, porque creen que les ha restado votos.

El duelo entre socialistas y populares tuvo su continuidad e unas afirmaciones del vicesecretario general del PP, Mariano Rajoy, quien advirtió que quien pacte con el PSOE tras las elecciones estará "legitimando" todos los acontecimientos que se han producido en España últimamente, en clara alusión a los escándalos de corrupción que han salpicado la vida política del país.

Por su parte, José María Aznar matizó hoy, en declaraciones a Onda Cero, sus manifestaciones de que los nacionalistas catalanes iban a Madrid "sólo a cobrar", para precisar que sus críticas o iban dirigidas al conjunto de Cataluña.

El líder popular reiteró que Pujol dijo literalmente en 1993 que iba a Madrid a cobrar por anticipado e insistió en su planteamiento de que todo el mundo debe tirar del carro, porque la política es compromiso y solidaridad.

En cuanto al tono de campaña y los ataques cruzados entre los candidatos, Aznar dijo que las polémicas, los rifirrafes y las enganchadas electorales no le interesan nada.

Quien salió hoy a la palestra para reprochar a Aznar sus paabras sobre la actitud del CiU al apoyar al Gobierno fue el líder de Unió Democrática de Catalunya (UDC), Josep Antoni Durán i Lleida, al asegurar que las palabras de Aznar constituyen un "despropósito" por presentar la imagen de una Cataluña "muy chantajista a la que sólo le preocupa cobrar y no tirar del carro".

El socio de Pujol expresó su deseo de que las reflexiones de Aznar sean fruto del momento electoral que vive el país y mostró su confianza en que si no rectifica con palabras, al menos puedahacerlo posteriormente con los hechos.

LLAMAMIENTO A LA DESESPERADA

El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Julio Anguita, hoy por tierras de Córdoba, auguró que Felipe González va a dirigir un llamamiento "a la desesperada" a los ciudadanos en la recta final de la campaña electoral, para que voten al PSOE, recurriendo a las "ojeras" y a la "dramatización", como hizo en el referéndum de la OTAN.

Anguita dijo que le han llegado noticias de que González pretender reeditar "aquella acción ramposa del referéndum de la OTAN", consistente en lanzar "amenazas terribles", como la de qué fuerza política iba a gestionar entonces el "no" a la Alianza Atlántica.

El líder de IU mostró su temor respecto a que el presidente del Gobierno apele de nuevo a sus "ojeras" y a sus "recursos truculentos" para amenazar con una posible victoria de la derecha.

Anguita resumió en una sola frase la idea principal que ha jalonado sus mítines de los últimos 15 días: "Hay que coger el barco de la Constitució Española y ver desde ahí que en la orilla izquierda del río esta sola Izquierda Unida, y en la orilla derecha los otros cuatro (PSOE, PP, CiU y PNV)".

En su balance de campaña, opinó que su coalición ha sido la única que ha tenido la "honestidad" y la "claridad" de exponer a los ciudadanos su posición sobre las alianzas poselectorales, a pesar de las críticas que ha recibido sobre este asunto.

Por su parte, el lehendakari José Antonio Ardanza manifestó que el PNV no piensa entrar en un hipotétic gobierno de coalición con el PSOE y CiU tras los comicios del 28-M, en el caso de que sea cierto que los socialistas se estén planteando esa posibilidad, que calificó de "intoxicación electoral".

Explicó que la oferta del partido socialista fue en julio de 1993 y que en aquel momento "razonamos tanto al señor González como a la opinión pública por qué motivos no aceptábamos aquella propuesta. Yo creo que las cosas, ni en el partido socialista ni en la relación con nosotros, han mejorado desde aquel mmento".