Ares aseguró que hasta el último momento pueden estar en liza 4 o 5 escaños como ocurrió en el 98 y vaticinó que EB-IU acabará obteniendo menos de los 3 escaños que se le asignaban en el momento de dar la rueda de prensa.

Juzgó, asimismo, que los resultados obtenidos por el PSE serán satisfactoriosporque "por lo menos nos mantenemos" y no se aventuró a decir si podría componerse una mayorís suficiente para formar un gobierno en el que no participara el PNV suficientemente fuerte y estable.

En su primera comparecencia de la noche tuvo palabras de agradecimiento para todos los ciudadanos que han depositido su confianza en el PSE y para los militantes y simpatizantes que han trabajado "en condiciones muy difíciles" durante la campaña.

Destacó la normalidad en la que se ha desarrollado el procso electoraly dedicó los resultados que obtenga el Partido Socialista a todos aquellos que trabajaron por él y hoy no han podido votar por haber sido víctimas del terrorismo y simbolizó a todos ellos en la figura de Fernando Buesa.

Los primeros líderes socialistas en llegar al hotel Ercilla de Bilbao fueron Gemma Zabaleta, Rosa Díez y Rodolfo Ares que hicieron acto de presencia antes del cierre de los colegios electorales y atendieron a la prensa.

El ambiente entre los dirigentes socialistas er de inquietud a la vista de los resultados de las encuestas realizadas a pie de urna. Según estos sondeos las expectativas del PSE-EE no eran del todo satisfactorias puesto que, en el mejor de los casos, preveía el mantenimiento de los 14 escaños con que ahora contaban los socialistas en el Parlamento vasco, e incluso contemplaban la pérdida de algunos.

Los dirigentes socialistas consultados tienen puestas sus esperanzas en el crecimiento de la participación de 8 puntos respecto a los comicios de 1998 que ha sido especialmente acusada en Vizcaya, donde creció más de un 10 por ciento. Precisamente Vizcaya es el territorio donde el PSE cuenta con mayor implantación.