La razón del fortalecimiento es doble: de un lado las menores posibilidades de un rápido descenso de los tipos de interés con un gobierno del PSOE que con uno del PP, y la actitud compradora de divisas que viene mostrando el Banco de España.

Un broker internacional señalaba a Servimedia que las dudas de los inversores extranjeros se centran ahora en la sustitución del ministro de Economía, Carlos Solchaga, ylas posibilidades de algún tipo de coalición con IU, cosa que consideran improbable.

El mismo broker considera que la peseta se mantendrá en los niveles actuales, entre 76,5 y 77 pesetas/marco a corto plazo aunque posteriormente podría experimentar ligeras depreciaciones.

Sin embargo, la evolución de la divisa en los próximos meses dependerá de la capacidad o no del nuevo gobierno de despejar incertidumbres, y de otras causas externas como la política que siga el Bundesbank en cuanto al descenso e los tipos de interés en Alemania.