El candidato-obispo, cuya vocación religiosa apenas si era conocida por los propios miembros del PP ni sus compañeros del hospital regional Carlos Haya, pertenece a la confesión desde hace catorce años, desués de interesarse por dicha religión tras leer un folleto explicativo.

De actitud recta, hijo de una familia de fuertes convicciones católicas, Robles fue ganando puestos en su Iglesia, hasta llegar a ser una de las personas más significativas entre los mormones malagueños.

Casi dos metros de altura y con la sonrisa siempre en los labios, Mario Robles ha colaborado estrechamente en la organización de actos y cursos de pervención a las drogas, así como en propuestas de rehabilitación de marginado.

EL PP Y EL OPUS

La Iglesia Mormona propugna entre sus dogmas de fe el respeto máximo a las jerarquías eclesiásticas, estatales y judiciales, hecho que beneficia a este candidato, que aún no ha calibrado sus posiblidades reales de obtener un escaño en el Senado.

Hasta la pasada legislatura, el PP sólo contaba con un senador por esta provincia. Sin embargo, los más allegados a Mario Robles confían en sentarlo en la Cámara Alta. "Que no digan después que este partido está dominado por el Opus", omentó a Servimedia un portavoz del Partido Popular.