CiU, con el 32 por ciento de los apoyos, se beneficiaría de esta caida del voto socialistapasaría a ser la primera fuerza de Cataluña, al mantenerse con los 18 escaños de las elecciones generales de 1989.

La tercera fuerza política sería el Partido Popular (17 por ciento), que pasaría de los 4 diputados de 1989 a una estimación de entre 9 y 10 escaños. Izquierda Unida conseguiría el 10 por ciento de los votos, lo que le proporcionaría 3-4 escaños.

Destaca también la obtención de representación por parte de Esquerra Republicana (ERC), con un escaño, y la desaparición dentro del arco prlamentario catalán del CDS.