Estas son las primeras reacciones del Ministerio de Defensa en el marco de la investigación interna abierta por el Ejército de Tierra tras el accidente, según informa el departamento que dirige José Antonio Alonso.

La investigación "mantiene, de modo preliminar, que pudo existir una conducción no adecuada a las instrucciones recibidas". El vehículo se encontraba en "perfecto estado", desde el punto de vista técnico, por lo que el vuelco pudo producirse por "un giro brusco a la izquierda por parte del conductor, cuyo permiso de conducción para este tipo de vehículos estaba en vigor desde junio de 2005".

El itinerario que siguieron los dos vehículos que participaban en la demostración "no fue el planeado inicialmente", debido a que la orden que se impartió por el responsable del Batallón de Zapadores fue que "todo el trayecto se realizara por la pista de asfalto que rodea al campo de fútbol". "El conductor sí respetó la orden de mantener una velocidad reducida", apostilla.

La investigación interna, que no prejuzga el procedimiento abierto por la jurisdicción ordinaria, ha puesto de manifiesto que el acomodo de los pasajeros sobre el vehículo se realizó al entender los responsables de la exhibición que "no entrañaba riesgo alguno de acuerdo con las condiciones iniciales establecidas".

En cuanto a la utilización de casco protector, su uso puede ser contraproducente, ya que su talla desproporcionadamente grande para los niños puede provocar lesiones en cuello o rostro.

NO MÁS CIVILES A BORDO

Por otra parte, el Ministerio de Defensa, a través del JEMAD, ha dado"instrucciones precisas para que a partir de hoy se prohíba durante la realización de exhibiciones, jornadas de puertas abiertas u otros actos similares el embarque de civiles ajenos al servicio en medios móviles militares, tanto terrestres, navales o aéreos".

Sólo quedan exentos de esta prohibición los casos reales de emergencias y ayudas a la población civil y los supuestos relacionados con operaciones de las Fuerzas Armadas que se ajustarán a los previsto en las correspondientes órdenes de operaciones.

Por otra parte, el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), el teniente general Carlos Villar Turrau, recién estrenado en su cargo, también ha dado "instrucciones para que se extremen las medidas de seguridad en todas las actividades de estas características en el seno del Ejército".