La dirección del PCE tacha de "histéricas", "hipócritas" y "cobardes" algunas de las críticas, y hace una mención especial a las formuladas por los dirigentes de la corriente Nueva Izquierda (NI).

"Algunos miembros de la NI", afirma, "han entrado en la dinámica descalificadora y políticamente errónea de otros sectores y personas, que parecen haber descubierto la sublimación republicano-monárquica que han ido haciendo en un largo proceso de trnsmutación ideológico-política".

El informe arremete contra los renovadores y les acusa de defender un espacio entre IU y el PSOE desde un proyecto cada vez más diferente.

"Sus mayores fuentes de inspiración para la crítica, e incluso para la descalificación, no están en el PSOE, que ha gobernado durante trece años, ni tan siquiera en el PP que está gobernando con medidas que no coinciden con nuestros acuerdos, sino en IU, contra la dirección de IU".

Para el PCE, Nueva Izquierda no escatima casión "para arrear contra el primitivismo o el fundamentalismo de la dirección de IU, de Julio Anguita o del PCE".

Según el informe, las declaraciones recientes de algunos de dirigentes renovadores apuntan la posibilidad de una "ruptura" de Nueva Izquierda o de inminentes "escisiones".

Sobre Iniciativa per Cataluña también se hacen consideraciones muy duras y se denuncia especialmente sus reproches al discurso de Julio Anguita en la última fiesta del PCE.

En alusión al GAL, el documento adverte que el PCE no aceptará ninguna ley, escrita o no, de "punto final", a pesar de que defiendan lo contrario las fuerzas políticas mayoritarias.