Mientras este examen auditivo es muy útil para los adultos, los médicos consideran que no es muy apropiado para los niños, ya que éstos se distraen fácilmente y les resulta molesto tener que prestar atención al test.

Solamente en EEUU hay más de 25 millones de personas que tienen algún tipo de problema auditivo, pero la mayoría no lo sabe. Estos problemas son difíciles de detectar porque, a menudo, la pérdida de audición se desarrolla gradualmente y no supone molestia, dolor o incomodidad. Con este nuevo tipo de prueba fácil y rápida, aprobado recientemente por el Gobierno americano, los médicos esperan que más personas se hagan revisiones auditivas periódicas para atajar cuanto antes cualquier tipo de problema.