El informe, que analiza el cumplimiento en todo el mundo de la prohibición de aplicar la pena de muerte a delincuentes menoresde 18 años, señala que dos tercios de las ejecuciones conocidas de este tipo de delincuentes en todo el mundo durante los últimos diez años fueron en Estados Unidos.

Asimismo, las únicas cuatro ejecuciones de jóvenes que cometieron el delito por el que fueron condenados antes de haber cumplido los 18 años que han tenido lugar en los últimos 18 meses también se registraron en los EE.UU., que es actualmente el único país que continúa llevando a cabo abiertamente estas ejecuciones en el marco de su sistea de justicia penal, denuncia Amnistía.

Desde 1994 hasta el año 2002, Amnistía ha contabilizado un total de 22.588 ejecuciones en 70 países, de las que 19 fueron de delincuentes menores de edad en el momento de cometer el delito, que fueron ejecutados en 5 países. Doce de estos ejecutados lo fueron en Estados Unidos.

Ante esta situación, AI recuerda la existencia de cuatro tratados de derechos humanos de ámbito mundial o regional que excluyen explícitamente a los delincuentes juveniles de la penade muerte. Esta exención también esta reflejada en los Convenios de Ginebra y sus dos protocolos adicionales. "La prohibición está tan reconocida y es tan respetada que se ha convertido en un principio del derecho internacional", indica Amnistía.

Por ello, la organización pide que se reconozca la prohibición como norma imperativa del derecho internacional general, vinculante para todos los países, independientemente de los tratados que hayan ratificado y de las condiciones que hayan puesto a dichas raificaciones.